El tratamiento de la hipoacusia ha experimentado una auténtica revolución en los últimos 50 años. Si en los años 1970s las únicas opciones disponibles para mejorar la audición eran la cirugía del oído crónico y los audífonos de aquella época, en 2023 encontramos múltiples soluciones quirúrgicas y no quirúrgicas que nos permiten individualizar el tratamiento, tratando de buscar la mejor solución para cada tipo de pérdida auditiva. Y esto es cada vez más importante teniendo en cuenta que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) más del 5% de la población presenta problemas de audición (432 millones de adultos y 34 millones de niños), estimándose que en 2050 esta cifra alcanzará los 700 millones. En función del grado y tipo de hipoacusia existen diferentes dispositivos que incluyen prótesis auditivas, implantes de conducción ósea, implantes activos de oído medio, implantes cocleares (IC) e implantes de tronco cerebral (ABI). En el presente curso se explicarán los principales dispositivos auditivos, con una breve descripción de los mismos. Se presentarán casos clínicos con vídeos explicativos de las principales técnicas quirúrgicas. Se abordarán temas controvertidos como los dispositivos de conducción ósea no implantables, el IC en malformaciones y los casos en los que es preciso decidir entre el IC y el ABI. Entre el audífono y el ABI hay un mundo de soluciones auditivas. En nuestras manos está elegir la más adecuada para cada paciente.